Resuelve tus dudas sobre la fascitis plantar
La fascitis plantar es una afección bastante frecuente que puede generar dudas al confundirse con otras. En el artículo de hoy resolvemos todas tus preguntas al respecto.
¿Estás buscando un podólogo en Las Rozas o bien un buen podólogo en Majadahonda y has llegado hasta este blog? Soy Alejandra Narros, podóloga con consulta en Villanueva del Pardillo. También presto servicio a domicilio por lo que, si vives en Las Rozas, puedes concertar una cita conmigo.
Empecemos por el principio: ¿qué es la fascitis plantar?
La fascitis es una de las causas más habituales de dolor en el talón. Es una especie de punzada muy molesta en la parte inferior del pie. Se nota especialmente después de despertarnos.
Se denomina fascitis porque es una inflamación de la fascia plantar, es decir, del tejido grueso que recorre la parte inferior del pie, del talón a los dedos.
La función de este tejido es amortiguar y soportar el arco del pie, absorbiendo el impacto al caminar. Cuando lo sobrecargamos o lo estiramos demasiado, puede aparecer inflamación o dolor.
La fascitis plantar es una inflamación de la fascia plantar, un tejido grueso que recorre la parte inferior del pie desde el talón hasta los dedos.
¿Qué la provoca?
Como siempre, encabeza esta lista el calzado inadecuado, un habitual de casi todos los problemas podológicos.
- Si los zapatos que usamos no soportan correctamente el arco, o las suelas son demasiado duras, el riesgo de padecer fascitis aumenta.
- A continuación encontramos los problemas biomecánicos, que pueden corregirse mediante plantillas y una buena técnica al caminar y correr.
- Sobrepeso y edad, pues la fascitis plantar es más común en personas de entre 40 y 60 años y en aquellas cuya fascia soporta más peso.
- Las actividades que implican mucho tiempo caminando, corriendo o de pie, también pueden sobrecargar la zona.
Síntomas y tratamiento
El síntoma principal que vas a notar si padeces fascitis plantar es el dolor en el talón, que puede extenderse a toda la planta del pie.
A medida que entramos en calor, esa molestia puede disminuir, volviendo a aparecer después de estar en reposo o tras mucho tiempo de pie.
El tratamiento de la fascitis incluye:
- Reposo: obviamente, evitar las actividades que empeoran el dolor es básico.
- Hielo: aplicarlo varias veces al día durante 15-20 minutos puede ayudarnos a aliviar el dolor, aunque no a tratar la lesión en origen.
- Estiramientos y fisioterapia: ejercicios y técnicas de masaje específicos contribuyen a estirar la fascia y el tendón de Aquiles.
- Plantillas a medida: lo importante en este caso es que proporcionen el soporte adecuado para el arco del pie y distribuyan la presión de manera uniforme.
- Inyecciones de esteroides, ondas de choque o cirugía: cuando todo anterior no da el resultado que esperamos, consideramos alguna de estas opciones.
Si notas molestia en el talón al caminar, correr, llevar un rato de pie o cuando te levantas por la mañana, es posible que padezcas fascitis plantar. En ese caso, pide cita conmigo para comenzar a tratar tu lesión cuanto antes.
